Cualquier época es buena para visitar Barcelona, pero si quieres bañarte en sus playas, la mejor época es el verano. Aunque si lo que buscas es pasear por sus largas avenidas, conocer su Barrio Gótico y hacer una visita más cultural, una buena época es la primavera.
Transportes
Llegar a la Ciudad Condal es fácil gracias especialmente al Aeropuerto del Prat, el segundo gran aeropuerto de España, que cuenta con servicios de vuelos a Barcelona y desde la capital a otros puntos nacionales y del mundo de las principales compañías aéreas, así como las principales de bajo coste. Los visitantes también pueden optar por el tren, gracias a sus dos estaciones con medias y largas distancia, trayectos normales y de alta velocidad. También se puede llegar a Barcelona a través de la carretera por medio del autobús o el vehículo particular, e incluso en barco desde las islas.
La red de transporte público de Barcelona es muy buena. La mejor forma de hacer los desplazamientos largos dentro de la ciudad es utilizando el metro. Prácticamente no necesitarás otro medio de transporte porque con él llegas a todos los sitios y es una medio bastante sencillo de utilizar. En la ciudad hay ocho líneas de metro. El metro se complementa con una buena red de tren de cercanías, ideal para llegar a los municipios de la periferia y del área metropolitana, y con el tranvía y los autobuses. La mejor forma de utilizar el transporte público es con las tarjetas combinadas. Depende de los días de tu estancia en Barcelona, tu interés por desplazarte en transporte público en la ciudad y la distancia de tu Hotel en Barcelona, tendrás que optar por la tarjeta para turistas Hola BCN! para 2, 3, 4 o 5 días o por la tarjeta T10 que te da 10 pases de 75 minutos de transporte por la ciudad. El billete sencillo solo merece la pena si vas a hacer muy pocos viajes. La tarjeta Hola BCN! incluye el trayecto de la línea de metro L9 Sud que lleva al aeropuerto.
Cosas que no debes dejar de ver y hacer:
La vida social de Barcelona tiene su epicentro en la céntrica plaza de Catalunya. Esta es la zona más comercial de la ciudad y de la que parten las conocidas Ramblas. Las cinco ramblas se dirigen desde la Plaza de Catalunya hasta el puerto pasando por la zona más bulliciosa de la ciudad. Un paseo por las Ramblas te mostrará lo más icónico de Barcelona, con muchos puestos de venta tradicionales y el emblemático mercado de la Boquería. En las Ramblas está uno de los símbolos de la ciudad, el Teatro del Liceo, que sobrevivió al incendio de finales del siglo pasado con más fuerza que nunca. Otro de los edificios más interesantes de las Ramblas es el Palau Guell, con el característico estilo modernista de gran parte de la ciudad.
El puerto de Barcelona es una de las zonas más rehabilitadas desde la reforma que tuvo la ciudad con motivo de los Juegos Olímpicos. El Monumento a Colón es lo más representativo de esta nueva zona que junto al mar ha creado el World Trade Center de Barcelona, el complejo de ocio Maremagnum y el Aquarium. Dejando de lado el Puerto, nos podemos encaminar hacia la zona más antigua de la ciudad y, posiblemente, la que contiene más monumentos y edificios singulares. El Barri Gótic es un entramado de calles caóticas y estrechas que contrastan con el del resto de la ciudad. La ausencia de grandes avenidas y la antiguedad de las edificaciones nos muestran el origen medieval del barrio. La Catedral de Barcelona es el edificio más significativo del Barri Gótic. Muy cerca, el Palacio Real y la plaza de Sant Jaume, presidida por el Palau de la Generalitat de Catalunya y el Ayuntamiento de Barcelona completan el conjunto arquitectónico. A las afueras del Barri Gótic'está el conocido Mercat del Born, uno de los más populares de la ciudad.
El ensanche de Barcelona, l'Eixample, se extiende al norte de la Plaza de Catalunya, con la Avenida Diagonal como gran arteria que corta todas las paralelas y perpendiculares de esta gran zona. En el Passeig de Gracia número 92 podemos encontrar Casa Milà, una de las obras arquitectónicas más reconocidas de Antoni Gaudí. Dentro del territorio del gran arquitecto barcelonés destaca la Sagrada Familia como el principal y más reconocido símbolo de la ciudad, aún sin terminar y con un estilo único y grandioso. El Parc Guell, con sus incontables recursos arquitectónicos y con el atractivo de poder ver una panorámica de la ciudad única, es otra de las grandes atracciones que debemos visitar.
Dos de los puntos más importantes y con mejores vistas de la ciudad son el Tibidabo, al que se puede subir con el Tranvía Blau, un tranvía turístico de época que te llevará a la cima y Montjuïc. A este último monte se puede llegar a través de la Plaça d'Espanya construida para la exposición universal de 1929.
Gastronomía, ocio y tiempo libre:
Uno de los signos distintivos de Barcelona es su rica gastronomía con platos como la escalivada, la butifarra, el "pa amb tomàquet", el alioli, la escudella, los calçots, las cocas de recapte y, por supuesto, la crema catalana, entre otras delicias. La mejor zona para degustar estos platos está entorno a las Ramblas y la Plaça de Catalunya o cerca de la Barceloneta.
Una de las mejores épocas para ir a Barcelona es en abril, donde el 23 se celebra el Día de Sant Jordi, patrón de Cataluña. Esta fiesta coincide con el día internacional del libro y es muy habitual que, a pesar de no ser día festivo en la ciudad, la gente salga a la calle para visitar los múltiples puestos de venta de libros que es exponen en la calle. La ciudad este día tiene un aroma especial. Se considera una fiesta de los enamorados, donde los hombres regalan rosas a sus amadas y ellas, libros. Por eso junto a los puestos de libros suele haber muchos de rosas.
Uno de los grandes atractivos con los que cuenta Barcelona son sus playas de gran calidad que se extienden a lo largo de todo el litoral de la ciudad, con excepción de las zonas portuarias. Todos los Hoteles en Barcelona tienen cerca una playa con todos los servicios, y las hay para todos los gustos, incluso nudistas. Las más populares son la Playa de la Barceloneta, la más céntrica y la de Somorrostro.
Barcelona se ha convertido en las últimas décadas en un destino habitual de turismo que busca ciudades con mucha vida nocturna, siendo una de las mejores ciudades del mundo para disfrutar de la noche, con el atractivo de que muchas discotecas y salas de fiesta tienen terrazas al aire libre para disfrutar durante gran parte del año del buen clima de Barcelona. En muchas zonas de la ciudad, sobre todo en zonas cercanas a la costa, encontrarás un buen local donde pasar la noche, bailar y tomar unas copas con un gran ambiente. La zona más tradicional para salir que frecuentan los turistas están en la ciudad vieja, en el Paseo Marítimo de la Barceloneta y junto a la Villa Olímpica. Gran parte de la marcha de Barcelona se ha desplazado en los últimos años a la zona del Maremagnum. En la zona del Paralelo, aunque ha perdido mucho, sigue siendo la zona habitual para los amantes del teatro de variedades. Los amantes de la música más independiente, pueden encontrar bares en la zona del Poblenou, donde varios bares siguen anclados en los ochenta y en el rock.
Los alrededores de Barcelona tienen un gran número de lugares donde poder disfrutar de excursiones de un día. Los lugares más habituales son: el Monasterio de Monterrat, el Parque Natural del Montseny, el casco histórico de Vic, la playa de Sitges y el Parc Natural de la Sierra de Collserola.
Asi son los turistas que visitan Barcelona