Toma un vino caliente en Winter Wonderland, móntate en sus atracciones o pasea por sus puestecillos. ¿O quizás prefieres hacerlo por los de Southbank? Si no te va el frío, mejor hacerlo en una de las galerías comerciales: su decoración supera cualquier expectativa. ¿Será por planes en Londres en Navidad?
Sí, ya sabemos que en Londres anochece a las 4 y que hace frío, pero no se nos ocurre mejor manera de combatirlo que con un vino –o un chocolate– caliente en mano, recorriendo los puestos de Navidad de Winter Wonderland o, si te van las emociones fuertes, descargando un poco de adrenalina en alguna de sus atracciones. Y es que en este parque de atracciones situado en Hyde Park tienes de todo, desde mercadillo a puestos de comida, regalos y artesanía, espectáculos y música en directo, una enorme pista de patinaje y hasta un «Santaland» para pasar un rato con Papá Noel. Sin duda una cálida bienvenida a la Navidad en Londres.
El SoHo de Londres es una pequeña muestra de que la Navidad, en Londres, se vive a todo color. Basta con pasear por Carnaby Street y dejar que las luces de Regent y Oxford Street guíen tu camino en una tarde de compras por dos de las calles más largas –y concurridas– del centro para darse cuenta. Otro plan alternativo es ver cómo luce Londres en Navidad desde el Támesis, en un crucero nocturno que incluya cena y copa de champán, ¡pura sofisticación! Tampoco te pierdas el ambiente navideño de St. Katherine Docks, Covent Garden, South Bank, Kew Gardens –a los que volveremos después– y el ZSL London Zoo.
Puede que Winter Wonderland les haga la competencia en tamaño, pero a entrañables, ubicación y entorno, hay mercadillos a los que es difícil ganarles. No hace falta irse muy lejos: el mercado de Covent Garden es uno de los clásicos de la Navidad en Londres, como lo es también el «Winter Market» que acompaña el curso del río a su paso por South Bank, con una práctica zona a cubierto para protegerse del tiempo dentro del Southbank Centre. También con el Támesis como telón de fondo tienes el mercadillo «Christmas by the river», que además cuenta con unas idílicas vistas sobre el Tower Bridge.
Si vas con niños a Londres, seguro que te encantará este plan. No hay Navidad en Londres que se precie sin tour por las mejores y más emblemáticas jugueterías de la capital. Un recorrido que debe empezar por una de las más grandes: la de Hamleys. Con sus ocho plantas, ya solo con echarle el ojo a sus logrados escaparates merece la pena pasarse, sin mencionar a los ayudantes de Papá Noel cantando villancicos y danzando, las pompas de jabón que nublan la vista y las sonrisas de los más pequeños ante semejante botín. Imprescindibles también son la tienda de LEGO –la más grande del mundo–, o la tienda de M&Ms, un paraíso de tres plantas para los amantes de estas bolitas de chocolate.
Prepara calzado cómodo y calentito, porque la Navidad en Londres se vive a pie –vale, con algún que otro trasbordo en metro, sino, imposible– para conocer los rincones con más encanto de la ciudad. En este caso, nuestra propuesta tiene como protagonistas a los árboles de Navidad, esos abetos gigantes cargados de luces y adornos de lo más «cuquis» que seguro se llevarán más de una foto. Entre los más reseñables y bonitos están el que preside la entrada del Bank of England –uno de los más grandes–, el de Covent Garden –que además tiene su mercadillo como aliciente adicional– y el de Trafalgar Square que, al parecer, es un regalo que le hace Noruega al Reino Unido con motivo de estas fechas.
Hay quien está deseando que llegue diciembre para ponerse los patines y danzar por una pista de hielo al son de la música. Si es tu caso o te animas a probar al menos, la Navidad en Londres es un momento ideal. Porque no encontrarás un enclave más entrañable y una oferta más variada que la que tienes en el centro de la ciudad. Las que más fama tienen son la pista de hielo que montan delante del Museo de Historia Natural, junto a un tiovivo y un bar donde tomar chocolate caliente, la de Somerset House, un palacete neoclásico a orillas del Támesis o la de Canary Wharf, por nombras algunas.
Si te gustan los musicales, te recomendamos que aproveches tu visita a Londres para ver uno en el «Broadway» londinense situado en Covent Garden, donde encontrarás muchos de los musicales del Broadway neoyorquino. Por la zona tienes también un montón de restaurantes y pubs, con lo que ya tienes plan para toda la tarde/noche. Para los amantes de Harry Potter, en cambio, os traemos un plan irresistible: celebrar la Navidad en Londres con un espectáculo en torno al mítico mago organizado por la mismísima Warner Bros. Incluye un tour por los estudios de la Warner donde se grabaron todas las pelis: escenarios, efectos especiales, objetos originales... Un lugar de culto para los fans de la saga.
Quien dice Harrods dice los grandes almacenes Liberty London, los mismos que dan nombre al famoso estampado de pequeñas flores, o la hermosa galería del Leadenhall Market. En los primeros encontrarás una fachada iluminada que deslumbra a la vista y que este año lleva el nombre de Dior por bandera con un mágico espectáculo de luces. Espíritu inglés y lujo francés en un escenario único, desde el 11 de noviembre al 3 de enero. Por su parte, los exclusivos almacenes Liberty London, ubicados en un edificio histórico de estética tudor junto a Regents St., encontrarás salones íntimos en los que las piezas orientalistas, el lujo y el exotismo campan a sus canchas, inundándolo todo de un aura de sofisticación que se intensifica por Navidad.
Al caer la noche, este jardín botánico situado en el suroeste de Londres, en la zona 3, se convierte en un laberinto de luces y juegos de magia en el que no faltan los árboles iluminados, los barquitos de papel flotando en el lago y hasta un Papá Noel. Prepárate para túneles de luz, jardines de fuego, bailarines junto al lago que juegan con su reflejo en el agua y un sinfín de actividades. Desde el 16 de noviembre al 8 de enero, solo por las tardes, de 4 a 8 aproximadamente. No dejes de tomarte un chocolate caliente en su cafetería, de quemar nubes de algodón por el camino y saludar a Papá Noel.
Olvídate de las tradicionales campanadas acompañadas de uvas; en Londres se despide el año con fuegos artificiales en un espectáculo de luz y sonido reflejado sobre el río Támesis a su paso por el famoso London Eye. Es un evento de tal magnitud y popularidad en todo el país, que las entradas para verlo se agotan enseguida. Pilla la tuya cuanto antes. Y tampoco te despistes después de la fiesta, porque en Londres el día de Año Nuevo también es fiesta, y el primer día del año se celebra con un desfile conocido como el «New Year's Parade» que sale a las doce del mediodía de Piccadilly Circus y hace un recorrido de unos 2,5 kilómetros por el centro.
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